Los 58 equipos de fotomultas y 80 radares serán movidos de su lugar.
A partir de enero empezarán a funcionar los equipos en su nuevo sitio, para dar por iniciado el nuevo esquema de tránsito.
Los aparatos de las fotomultas que instaló el anterior gobierno de la Ciudad de México serán reubicados por la actual administración, quien ya inició con las labores de reorientación en las zonas escolares con mayor número de accidentes viales registrados.
Claudia Sheinbaum Pardo, jefa de gobierno capitalino, señaló que el sistema de fotomultas tiene un objetivo meramente recaudatorio y deja de lado el mejoramiento de la seguridad vial. «Las fotomultas eran recaudatorias, no eran para disminuir incidentes de tránsito porque los radares y cámaras estaban ubicadas en lugares donde no necesariamente eran los mayores incidentes de tránsito. Tanto en el esquema de los escoltas como en el tema de las fotomultas y radares se acabó la corrupción, por eso se acaban los contratos y entramos en un nuevo esquema de protección a los peatones y a los ciclistas», aseveró.
La mandataria estuvo acompañada por Andrés Lajous, titular de la Secretaría de Movilidad (Semovi), quien detalló que los aparatos serán puestos en 200 vialidades ubicadas en los alrededores de escuelas públicas y privadas de la ciudad; el secretario agregó que son 58 equipos de fotomultas y 80 radares.
Además, indicó la exdelegada, se identificaron las 20 escuelas con más accidentes viales, en las cuales se pondrán pantallas para invitar a los automovilistas a tomar las precauciones necesarias en pro de la seguridad de los peatones. Asimismo, apuntó que este año se han registrado 9 445 incidentes de tránsito en la ciudad, los cuales han dejado un saldo de 306 muertos, por lo que se optó por cambiar el sistema de fotomultas.
Los 138 equipos empezarán a trabajar en su nueva ubicación a partir de enero, con lo cual se iniciará el nuevo esquema de puntos y trabajo comunitario que implementará la administración actual, externó Lajous.
Por otro lado, Sheinbaum Pardo acotó que, como parte de este nuevo proyecto, se trabajará en los 35 cruces más peligrosos de la Ciudad de México, los cuales se encuentran distribuidos en ocho alcaldías: Benito Juárez, Iztacalco, Álvaro Obregón, Tlalpan, Azcapotzalco, Cuauhtémoc, Coyoacán e Iztapalapa. La intervención en estos puntos consistirá en mejorar los semáforos, señalamientos, equipos, hacer adecuaciones geométricas y dar mantenimiento; en estas obras la secretaría de Obras y Servicios (Sobse) invertirá 60 millones de pesos.
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