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La policía federal coordinará las acciones en conjunto de seguridad.

Participarán los municipios de Nezahualcóyotl, Ecatepec, Chalco e Ixtapaluca; así como las alcaldías de Tláhuac, Venustiano Carranza y Gustavo A. Madero

El límite territorial entre entidades suele ser una circunstancia aprovechada por los delincuentes, quienes operan en las zonas colindantes para quedar impunes. Bajo esta premisa los gobiernos de la Ciudad de México, el Estado de México y federal trabajarán de forma conjunta para terminar con esta situación.

Con este propósito se reunieron Claudia Sheinbaum Pardo, jefa de gobierno de la capital; Alfredo del Mazo Maza, gobernador mexiquense; y Alfonso Durazo, titular de la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana. En el encuentro los tres funcionarios se comprometieron a firmar durante el próximo mes un convenio de colaboración que elimine el límite de acción de los cuerpos policiales de las dos entidades.

Durante la reunión se estableció la necesidad de realizar operativos de forma conjunta que inhiban los altos índices delictivos, sobre todo en lo referente a robos a vehículos, transporte público y cuentahabientes; los dos mandatarios concordaron en implementar este tipo de acciones.

La jefa de gobierno de la capital habló sobre una de las razones que motivó este proyecto: «Hay un delito en la Ciudad de México y el delincuente se pasa al Estado de México porque solo es una calle y no hay manera de tener coordinación con el Estado de México». Sheinbaum Pardo indicó que esta situación se aplica de la misma forma a la inversa, por lo que es prioritario efectuar estas adecuaciones entre ambos gobiernos.

Por otro lado, Del Mazo declaró: Hemos platicado de compartir inteligencia entre la Ciudad de México, el Estado de México y la Secretaría de Seguridad y poder identificar objetivos prioritarios en conjunto». El gobernador priista detalló que el 45 por ciento de los delitos registrados en su entidad se cometen en la zona limítrofe, además, añadió que se instalarán 7 500 elementos de seguridad (entre policías federales, militares y del ejército mexicano), de los cuales, hasta el momento, se ha movilizado al 46 por ciento. Esto forma parte de una primera etapa y para la segunda se tiene contemplado agregar 14 mil uniformados.

Mientras tanto, Durazo externó que el gobierno nacional se compromete con la causa y enviará 7 500 elementos entre la policía federal y el Ejército para complementar las acciones de las dos administraciones implicadas.

 

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